No es una sorpresa que Alberto Núñez Feijóo sea el nuevo presidente del Partido Popular; la refundación del Partido Popular viene de la mano de la caída del líder Pablo Casado, mal rodeado de consejeros, los cuales se han equivocado de pleno con la crisis abierta con el gobierno popular de la Comunidad de Madrid. A Pablo Casado solo le ha quedado la humildad de la derrota.
La situación actual del principal partido del centro-derecha incide directamente en el modelo bipartidista que sustenta la monarquía parlamentaria española. La irrupción de Vox, partido que ha sabido aprovecharse del tremendo desgaste que el Partido Popular conoció con el gobierno de Mariano Rajoy y Sorolla Sáenz de Santamaría.
El XX Congreso del Partido Popular se ha celebrado del día 1 al 3 de abril de este año, en Sevilla; elegido como nuevo presidente Alberto Núñez Feiójo, la derecha más consolidada de España prefiere un político gallego, que conoce la política autonómica, porque era el presidente de Galicia, y, a la vez, ambicionaba la jefatura del Partido Popular nacional.
A lo largo de la semana Alberto Núñez Feijóo se reunirá con el presidente del gobierno, Pedro Sánchez. El nuevo líder del PP ya anunciado que pretende llegar a acuerdos con el gobierno en asuntos fundamentales. El líder del Partido Popular ha conseguido el apoyo del 98% de los compromisarios del reciente Congreso del Partido Popular. El conflicto en Ucrania y la renovación del Consejo Superior de la Judicatura son dos asuntos que deben demostrar la nueva relación entre el gobierno de la nación y el nuevo líder de la oposición.
¿Reúne Alberto Núñez Feijóo cualidades suficientes para liderar el centro-derecha español?
La refundación del Partido Popular, improvisada ante las circunstancias, no puede ocultar que el político gallego ha encarnado la contradicción perenne de la política española: el poder autonómico frente al poder nacional. Como resultado de la interpretación de la Constitución española de 1078, el poder autonómico ha crecido gracias a la debilidad de los distintos gobiernos nacionales, desde la Transición. Galicia con Alberto Núñez Feijóo ha encarnado una nacionalidad histórica.
Alberto Núñez Feijóo debe cambiar los mensajes y slogans que dirige a los votantes españoles de centro-derecha. Tiene la competencia de Vox a la vista, partido éste que también debe reaccionar pronto y evitar verse sorprendido por la irrupción del citado político gallego, ahora líder del Partido Popular.
Los acontecimientos se han desarrollado muy deprisa. La crisis económica en España es un hecho, con una tasa de desempleo del 12,6 % en febrero de 2022; la prima de riesgo en 93 puntos, a 1 de abril del 2022; el IPC general registra una tasa del 9,8%.
Una realidad nacional agravada por el conflicto en Ucrania y la huelga de transportistas, que ha puesto en tela de juicio al gobierno de España; credibilidad y capacidad de acción. A decir verdad, el partido Socialista no esperaba un cambio aparentemente radical en la dirección del principal partido rival, el Partido popular. ¿Cómo manejará el Partido Socialista el cambio que proyecta el Partido Popular?
Alberto Núñez Feijóo debe rodearse de nuevos colaboradores, que demuestren una competencia de la que carecían los consejeros de Pablo Casado. Ya sabemos que Cuca Gamarra es la nueva secretaria general del Partido Popular; esta mujer, diputada y mano derecha, en principio, del nuevo líder popular. También debemos esperar nuevas incorporaciones al equipo de Núñez Feijóo.
La relación con Vox será otras de las piezas singulares que Alberto Núñez Feijóo no debe descuidar; el partido de Santiago Abascal es la amenaza más cierta para las expectativas del Partido Popular. La refundación del Partido Popular no puede dejar a todo el mundo contento. El tiempo dirá.
Últimos comentarios