Terminamos el año 2021 y un nuevo aniversario constitucional, una rutina que no provoca algarabía en el pueblo español. Las dificultades son múltiples; la epidemia global no desaparece, la inflación se dispara (5,6% consolidado en noviembre) y los partidos políticos siguen en sus estrategias y tácticas, sin provocar una reacción unida.

Desde 2015, no se celebra un debate de la nación; la crisis nacional prosigue y los representantes políticos queman etapas, sin recuperar el consenso que dio origen al régimen del 75, que fue refrendado por la Ley para la Reforma Política de 1975.

El líder de entonces era Adolfo Suárez, ya fallecido. Las primeras elecciones democráticas se celebraron el 15 de junio de 1977. El 8 de diciembre de 1978, se ratificó mediante referendo la Constitución española vigente. Hoy se celebra un nuevo aniversario constitucional; en concreto hace 43 años que la máxima ley justifica el régimen actual.

De nuevo, continúa la actividad parlamentaria, que no cesará hasta las próximas vacaciones navideñas. Recientemente, hace dos semanas que la coalición gubernamental presentó un buen número de enmiendas para reformar la Ley de Memoria Democrática. La Constitución sigue vigente, pero el consenso inicial, que conformó La Transición española, parece cada vez más diluido.

El pueblo español está acostumbrado a las celebraciones, a las nuevas proclamas, a las convocatorias electorales y a toda la puesta en escena electoral. Necesita olvidar muchos detalles históricos, por puro instinto de supervivencia. El nuevo aniversario constitucional no es una fiesta popular; una excusa para que mucha gente coja unos días de descanso.

Las encuestas políticas, bien sean encargadas por los partidos políticos o por el INE (instituto nacional de estadística) son imprescindibles para los aparatos de los partidos políticos y para la prensa que sostienen el debate político, desde su orientación política e intereses determinados no confesados.

No hay, en el corto plazo, una convocatoria electoral general a la vista. Las próximas elecciones en Andalucía, que se celebrarán el 2022, son la gran oportunidad para que los partidos políticos calibren sus verdaderas expectativas, con la vista puesta en las Elecciones Generales. Actualmente, una coalición entre el Partido Popular y Ciudadanos gobierna Andalucía, con el apoyo parlamentario de Vox. Los presupuestos andaluces han supuesto un punto de discordia entre la coalición gobernante y el partido liderado por Santiago Abascal.

Todas las conjeturas son posibles en el escenario andaluz, con proyección nacional. Cada elección democrática es el disparadero para los partidos políticos y los candidatos en liza. Los medios de comunicación calentarán baterías, a medida que se aproximen las elecciones andaluzas.

Justo a las 12 de la mañana del 6 de diciembre de 2021 comienzan los actos oficiales del nuevo aniversario constitucional. De nuevo, las declaraciones de los líderes de Podemos reivindican una República. Oficialmente, no hay ninguna acción parlamentaria destinada a una revisión constitucional. Cada actor político cumple con su cometido, con rigor y disciplina.

Hoy se producirán ausencias destacadas; los líderes nacionalistas vasco y catalán estarán ausentes; la novedad es el líder de Vox, que tampoco asistirá a las celebraciones constitucionales, dado que no se identifica con la política gubernamental.

Vuelve a demostrarse que La Transición política (1976) y La Constitución española de 1078 no ha conseguido solventar los problemas que España arrastra, desde tiempo inmemorial. Parecemos, los españoles, un pueblo sometido a un experimento político, sin que seamos conscientes de las posibles consecuencias. Como es habitual, los españoles improvisaremos, salvo los acérrimos seguidos de las formaciones políticas en liza.

Un nuevo aniversario de la constitucional, mientras la sexta ola del COVID-19 es una realidad; más de un millón de hogares con todos sus miembros en paro. Nadie llorará en la fiesta institucional que se celebra hoy. Nos acercamos al invierno, hoy el precio de la luz se dispara. Resignación.

 

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